Cómo Medir la Fiebre a un Perro
Los perros, al igual que los humanos, pueden sufrir de fiebre, lo que indica que su cuerpo está combatiendo alguna infección o inflamación. Detectar la fiebre a tiempo y actuar de manera adecuada es crucial para garantizar la salud y el bienestar de tu mascota. A continuación, te explicamos cómo medir la fiebre de tu perro y qué hacer dependiendo de la temperatura registrada.
¿Cómo Medir la Fiebre en un Perro?
Para medir la fiebre en un perro, lo más efectivo es utilizar un termómetro digital rectal específico para animales. Aquí te explicamos los pasos para hacerlo de manera segura:
- Prepara los materiales necesarios: Consigue un termómetro digital, preferiblemente diseñado para mascotas, y un lubricante como vaselina para facilitar la inserción. Si es posible, pide a alguien que te ayude a sostener al perro para evitar que se mueva.
- Aplica lubricante en el termómetro: Coloca un poco de lubricante en la punta del termómetro para que sea más fácil y cómodo de introducir.
- Coloca al perro en posición: Levanta la cola de tu perro con cuidado y, con suavidad, introduce el termómetro en su recto, aproximadamente 2-3 centímetros. Es importante mantener al perro calmado durante el proceso y lo más inmóvil posible, para evitar que se pueda hacer daño en el proceso.
- Espera la medición: Los termómetros digitales suelen emitir un pitido cuando la lectura está completa, lo que generalmente tarda unos segundos.
- Lee la temperatura: Retira el termómetro con cuidado y observa la temperatura registrada.
Ahora que ya sabes cómo medir la fiebre en un perro, vamos a ver qué significa cada rango de temperatura y cómo debes actuar en cada caso.
Rango de Temperaturas y Qué Hacer
- Temperatura Normal (38°C – 39.2°C / 100.4°F – 102.5°F):
Si la temperatura de tu perro se encuentra en este rango, su estado es normal y no hay de qué preocuparse. Es un buen momento para felicitarte por tu cuidado preventivo y verificar si el perro presenta otros síntomas de malestar. - Temperatura Elevada o Febrícula (39.3°C – 39.9°C / 102.6°F – 103.9°F):
Este rango indica que el perro puede estar experimentando un problema leve de salud. Es importante observar si hay otros signos de enfermedad, como letargo, falta de apetito o secreciones anormales. Mantén al perro hidratado, ofrécele agua fresca y monitorea la fiebre por 24 horas. Si no mejora, consulta con un veterinario. - Fiebre Alta (40°C – 41°C / 104°F – 105.8°F):
La fiebre alta en perros puede ser peligrosa y generalmente es un signo de infección grave o inflamación. En este caso, es fundamental llevar a tu mascota al veterinario lo antes posible para que determine la causa subyacente y brinde un tratamiento adecuado. Mientras tanto, mantén al perro en un lugar fresco y bien ventilado. - Fiebre Muy Alta (más de 41°C / 105.8°F):
Es una emergencia veterinaria. Una fiebre tan alta puede causar daños a los órganos y pone en peligro la vida del perro. Si el termómetro marca más de 41°C, actúa de inmediato y acude a una clínica veterinaria de urgencias. En el trayecto, intenta mantener al perro fresco con paños húmedos en la zona del abdomen, cuello y patas.
Consejos para Bajar la Fiebre en Perros
Si tu perro presenta fiebre moderada (por encima de 39.3°C), estos consejos pueden ayudar mientras acudes al veterinario:
- Mantén al perro en un lugar fresco: La temperatura ambiente debe ser agradable, y puedes usar un ventilador para mejorar la circulación del aire.
- Hidrata a tu mascota: Ofrécele agua fresca para prevenir la deshidratación, que es un riesgo cuando hay fiebre.
- Paños húmedos: Puedes usar paños húmedos en la cabeza, abdomen y patas para reducir la temperatura corporal. Evita mojarlo completamente, ya que el choque térmico puede ser contraproducente.
- Evita medicamentos humanos: Nunca le des a tu perro medicamentos para bajar la fiebre sin la aprobación de un veterinario. Algunos medicamentos humanos pueden ser tóxicos para ellos.
Conclusión
Conocer cómo medir la fiebre en los perros y qué acciones tomar según los rangos de temperatura es una habilidad fundamental para todo dueño de mascotas. La fiebre puede ser una señal de alarma que no debe tomarse a la ligera. Siguiendo estos pasos, podrás actuar con rapidez y proporcionar a tu perro la atención que necesita para recuperarse lo antes posible.
Mantente atento a cualquier signo de malestar en tu mascota y no dudes en buscar ayuda profesional cuando sea necesario. ¡La salud de tu perro es lo primero!